Debido a la ubicación geográfica de México, puntos estratégicos como el puerto en el Atlántico y el del Pacífico, son actualmente grandes potencias para el arribo de buques provenientes de todo el mundo, convirtiéndose en lugares de extrema importancia para el comercio internacional y nacional.
Estos últimos dos conceptos se relacionan directamente con China y Estados Unidos, quienes son las naciones con mayor producción y consumismo, respectivamente, mismas que debido a su enlace buscan cualquier medio para comunicarse y mejorar sus intercambios.
Justamente ahí es donde incrementa la relevancia de México como conector de estos factores. En este intercambio muchos de los buques provenientes necesariamente tienen como puntos de escala en el puerto de Manzanillo y en el puerto Lázaro Cárdenas, y aunque las estructuras de los puertos son uno de los factores más importantes, los “profesionales egresados de las Escuelas Náuticas cuentan con el perfil suficiente para ocupar puestos en las embarcaciones de bandera internacional”, mencionó el Capitán de Altura Francisco Riveros García, embajador de la Buena Voluntad de México en la Organización Marítima Internacional (OMI).
México: aportes a futuro
Con este contexto, el mundo ha puesto el foco en el territorio mexicano, tanto por sus puertos y proyecciones a futuro, como también por su capacidad profesional.
“Existe un semillero de oficiales marítimos, quienes a gran medida se han especializado, reflejando que la gente del mar son personas valiosas en las actividades comerciales”, mencionó el embajador.
En la misma línea, el cabotaje actualmente está impulsando los nichos de carga y pasajeros de forma más activa, significando también otra gran oportunidad y un nuevo foco de atención hacia México, donde actualmente aproximadamente cuenta con un registro de 200 mil embarcaciones, 2% de ellas turísticas, 8% mercantes y 90% pesqueras.
